José Manuel García
El resultado fue lo de menos. Lo importante es que la afición mazatleca se reencontró con el futbol profesional, en un cero por cero entre Dorados de Sinaloa y Gallos Marinos de Mazatlán, de carácter amistoso.
Lo mejor fue que más de 3 mil personas abarrotaron el estadio de la Sahop, en donde se vivió una tarde futbolera a más no poder.
Por los de casa jugaron en el primer tiempo los experimentados Francisco Luna, Eyssy Valdez y Tino Padilla, quienes pusieron en aprietos a los defensores de Dorados, sobre todo Luna, quien en sus tiempos jugara en Segunda y Tercera División.
Dorados intentaba con Mateo Fígoli y Melvin Valladares anotar, pero Ray Ureña, el arquero, no dejó pasar nada.
En el segundo tiempo, apenas al minuto cinco, Valdez y Natividad Carrasco tuvieron un conato de bronca y ambos fueron expulsados.
Dorados se fue con todo al frente, pero nunca llegó el invitado.
Luna habla emocionado del regreso del futbol profesional a Mazatlán y a la Sahop.
“Es un momento inolvidable, yo creo que los que jugamos y para la gente que vino a apoyar, es un gran paso que dio la directiva y el Municipio en apoyar este tipo de eventos, sobre todo que regrese la Tercera División a Mazatlán”, dijo Luna.
Padilla, quien jugara con Diablos Azules de Guasave, también se mostró muy contento por el juego y porque la Sahop ya tiene otra cara.
“Sin duda la gente tiene esa hambre de ver futbol profesional en la plaza, se dio hoy algo nunca vista para mí, campo empastado y llenas las gradas, la verdad, mucha emoción”.
Otro refuerzo de Gallos Marinos fue Érick Chávez, quien jugara en Colima en Segunda División.
A la afición no le importó el cero por cero, todos estaban contentos porque se había cumplido el sueño de ver a la Sahop empastada.
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