lunes, 21 de febrero de 2011

El ojo clínico

La diferencia entre ganar y perder es 5

Mercedes González

Este fin de semana no sólo Fernando “Kochulito” Montiel fue noqueado, sino también las “estrellas” de el Heat de Miami y cuatro de los grandes elementos de Celtics de Boston, quienes por una noche formaron parte del mismo equipo: el conjunto del Este.
Ayer, en una edición más del Juego de Estrellas que marca la mitad de la temporada de la NBA, el selectivo del Este cayó ante el Oeste por la módica diferencia de 5 puntos, quedando el marcador final 143-148.
Cuando reúnes a sagaces jugadores en un mismo equipo es difícil, estadísticamente, tener un resultado concreto. Si bien, el equipo comandado por Doc Rivers era el favorito para salir airoso, no obstante, si me permiten, considero que Greg Popovich supo mover mejor sus piezas.
A qué me refiero por piezas…por una parte Kobe Bryan, Kevin Durant y Paul Gasol y por otra, Emanuel Ginóbili, Dirk Nowitzki y Chris Paul. En tanto que Deron Williams y Blake Griffin lograron hacer click con las dos tercias antes mencionas.
Los rituales no son suficientes para ganar un juego y mucho menos una clavada espectacular, para ello se requiere de defensa, asistencias, buenos pases y esperar a que el enemigo ataque para que el árbitro marque “faul y cuenta”. De esa manera el resultado que obtendrás será tener una ventaja de más de 10 puntos en 4 cuartos.
Tras 45 minutos de espera, finalmente los mejores jugadores del momento de la NBA se colocaron sobre la duela del Staples Center de los Ángeles. Amare Stoudemire fue el encargado de abrir el marcador, permitiendo que el Este tomara la delantera, sin embargo, al minuto 10 el Oeste despertó cuando Bryan encestó la primer canasta.
El despertar del lado Oeste fue tal, que a Doc Rivers no le importó si sus jugadores serían abucheados o no. Faltaban por trascurrir 6 minutos del primer cuarto cuando Garnett, Pierce, Rondo y Allen entraron a la cancha.
Lamentablemente para el equipo del lado del Atlántico, los cambios no fueron del todo eficientes, ya que, los marcadores de los primeros cuartos fueron: 27-37 y 64-76. Llegó el medio tiempo y para ese entonces el mejor jugador del equipo azul era Chris Bosh con 12 puntos, en tanto que, por el conjunto de jersey rojo era Bryan con 21puntos, 6 rebotes y 3 asistencias.
El tercer cuarto concluyó 100-117. Parecía que el Este no lograría acercarse a menos de 10 puntos, pero, aplicando una frase del Rey de los deportes…”Esto no se acaba hasta que se acaba”. Faltando 4 minutos para que terminara una edición más del Juego de las Estrellas de la NBA, Lebron James se encargó de resucitar a la afición del Este y logró disminuir a 5 puntos la desventaja.
Con un minuto por jugar, Gasol y Chris Paul regresaron el aliento a la afición de los Ángeles, sin embargo, con un triple Ray Allen encendió una vez más la llama al colocar el marcador 143-146, pero un buen cobró desde la línea por parte del Kevin Durant, puso fin al encuentro.
Los líderes del juego fueron: por el Este, Lebron James con 29 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias. Mientras que Bryan logró 37 puntos, 14 rebotes y 3 asistencias. Cabe mencionar que Bryan consiguió su cuarto premio al Jugador Más Valioso en apenas 10 años, empatando así la marca de Bob Pettit en la NBA.
Hasta este momento el mejor equipo de la temporada es San Antonio con marca de 46-10, le sigue Miami con 41-15 y Boston con 40-14. El día de hoy lunes no hay juegos pautados.

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