OPINIÓN

Venados ponchones

José Manuel García

La verdad es que el inicio que han tenido los Venados ha sido muy bueno, a pesar de que el cerrador falló en sus primeras salidas y que son un equipo que se poncha demasiado.
Los rojos limpiaron a Guasave el fin de semana, pero arrastran una rachita de chocolates consumidos, que en verdad alarma.
En los últimos seis juegos se han ponchado en 44 ocasiones, lo que les da un promedio de poco más de siete abanicados por encuentro.
Puede presumir el segunda base Brian Bixler que es el líder de ese bochornoso departamento, con 18.
Y déjenme decirles que Bixler hace el 1-2 en el orden al bate con Christian Quintero, quien no canta mal las rancheras, con nueve ponches en sus últimas 35 visitas oficiales al plato.
Mazatlán es el equipo con más ponches recibidos con 92, algo que no es muy común para un equipo que tiene mucho chocador.
Pero entre Bixler y Quintero suman 29, pero también “destacan” los 14 de Rubén Rivera y los 13 de John Lindsey.
Lo preocupante es que el 1-2 del orden al bate se ponche demasiado.
Bixler viene de tomarse 128 chocolatitos en Triple A de Pittsburgh y otros 26 en sólo 44 turnos en la gran carpa.
De Quintero me extraña porque no es muy propenso a poncharse.
Contrario a éstos, Lorenzo Buelna sólo se había ponchado en tres ocasiones en 42 turnos, lástima que se pasará muchos días en el hule, por la doble lesión en la nariz, producto de un pelotazo en el jardín izquierdo.
La cosa tendrá que mejorar porque el martes llegarán los Naranjeros de Hermosillo y es la serie entre los dos mejores equipos de la liga.
Mazatlán está a medio juego de Hermosillo y qué mejor oportunidad para poder trepar a la cima del standing. En casa y ante su gente.
Veremos cómo se portan Pablo Ortega, Esteban Loaiza y Alfonso Sánchez ante la tropa de Homar Rojas.