EDITORIAL

En Las Tribunas

José Manuel García

Nadie quiere con Venados

Muchas veces aficionados, medios de comunicación y hasta los mismos jugadores nos preguntamos porqué los Venados de Mazatlán no hacen movimientos en su base nacional.
Hemos llegado a pensar que le da temor a la directiva hacer cambios por no romper con la armonía que tiene la organización.
Pero no es así.
Nos hemos dado cuenta de que nadie quiere darle nada a los Venados. Y cuando decimos nada, es nada.
Nos enteramos que los Venados necesitaban reforzar su infield y le pidieron a los Tomateros de Culiacán a Jaime Trejo, un jugador de medio pelo. Parecía que Trejo vendría a los rojos, a cambio de una jardinero de mucho más renombre, pero Juan Manuel Ley prefirió no “reforzar” al acérrimo rival.
También trataron de negociar con Águilas de Mexicali. Los multifinalistas pedían a Fernando Alejos, un jardinero de 32 años, que no ha pintado nunca en invierno.
Juega con Yucatán y ha tenido números decentes.
Sin embargo, la directiva cachanilla decidió no darle nada a Venados.
Y así se la han pasado, en estira y afloja, pero al final nadie quiere mandar jugadores a Venados.
Dicen que muchos opinan que a los rojos les mandan jugadores malos y que acá se hacen buenos. Así es que ni malos les mandarán.
A Mazatlán le urge que su gente joven dé el estirón, porque no hay nada confiable para el infield.
Se necesita que Francisco Javier Lizárraga, César Osuna, Jonathan del Campo, Carlos Esqueda y compañía den el estirón porque sino tendrán que echar mano con veteranos como Domingo Castro, a quien tomaron en el pasado draft.